Toca decir adiós a los excesos, que han dejado huella en nuestra figura tras las vacaciones. Seguro que en alguna ocasión has oído hablar sobre las llamadas dietas détox o depurativas, tan de actualidad en estos meses de vuelta del verano, cuando quien más quien menos tiene que perder esos kilos de más que ha ganado en vacaciones. “Popularmente, una dieta détox o depurativa hace referencia a una dieta de limpieza del organismo, posterior a una alimentación insana, ya sea tras el verano, las vacaciones o comidas familiares como en Navidad”,
Una labor del hígado y los riñones
Dietas que están siempre en el punto de mira, porque, aunque no son muy recomendadas por los expertos, siempre hay personas que las hacen. “La realidad es que no es necesario hacer este tipo de dietas, ya que el organismo dispone de los órganos encargados para practicar estas funciones (hígado y riñones) y éstas no se van a ver incrementadas por seguir unos días esta tendencia o por incluir ciertos alimentos mal llamados détox”, explica la nutricionista. Así, en su opinión, es mucho más beneficioso y eficiente cuando realizamos una alimentación en la que incluimos suficientes vegetales en nuestra dieta día a día que si lo hacemos un mes al año. “Es decir, que si tratamos de llevar una alimentación saludable nuestro cuerpo estará ‘más depurado’ sin sobrecargar de trabajo al hígado y a los riñones pero que, si no llevamos este tipo de alimentación, estos órganos ya se encargan de eliminar esas toxinas que nuestro cuerpo no necesita”, puntualiza.
¿En qué consiste y cuáles son sus beneficios?
Lo cierto es que nos encontramos con muchas personas que se apuntan a estos planes dietéticos. “Habitualmente, cuando la gente realiza esta práctica hace ayunos de comida y/o ingiere alimentos en formato líquido (como zumos verdes e infusiones) o, también, consume grandes cantidades de frutas y verduras reduciendo o eliminando los alimentos ultraprocesados y los alimentos de origen animal”, nos dice la nutricionista, que añade que siempre es un beneficio suprimir dichos productos y aumentar el consumo de alimentos vegetales en nuestra dieta, pero esto ha de ser revisado por un nutricionista para evaluar si esta práctica se lleva a extremos que puedan dar lugar a déficits alimentarios.“Los beneficios de una dieta saludable rica en vegetales se traducen en un mejor funcionamiento del tracto digestivo y un mejor control sobre el apetito al incluir más fibra. Además, las digestiones son menos pesadas, aumenta nuestro nivel de energía y mejora la hidratación, lo que evita la hinchazón y una mayor luminosidad en la piel”, añade.
Alimentos recomendables
¿Hay alimentos recomendables y otros prohibidos en una dieta détox? Es más, nos preguntamos si hay alimentos, podríamos decir, con propiedades détox. “La práctica habitual es que en este tipo de dietas se incluyan zumos a base de vegetales, muchas ensaladas, infusiones de plantas, etc.; y que se excluyan alimentos procesados, ricos en grasas y azúcares y alimentos de origen animal o que se reduzca su consumo”, nos cuenta.
La experta detalla que se suelen atribuir propiedades depurativas a infusiones de té verde o té rojo y otras plantas medicinales como el diente de león o el cardo mariano. En cuanto a alimentos, se suele potenciar el consumo de vegetales crudos y de alcachofas, espárragos, apio, espinacas, remolacha…
¿Cuál es la efectividad de estos planes de choque?
La nutricionista de Sanitas nos cuenta que, a corto plazo, pueden resultar beneficiosas en cuanto a la bajada de peso, ya que si venimos de hacer excesos (como puede ocurrir después de las vacaciones o de las fiestas navideñas), el hacer este tipo de dietas, que son muy bajas en calorías, pueden dar lugar a una bajada de peso considerable. Pero es algo que, si no se mantiene a largo plazo provocará un efecto rebote y, por tanto, una subida de peso mayor a la bajada conseguida.
¿Son recomendables desde el punto de vista nutricional?
“Habitualmente, los nutricionistas concienciados con los beneficios de adquirir hábitos saludables no promocionamos este tipo de prácticas, ya que dan lugar a que la población adquiera la idea errónea de que con incluir vegetales en su dieta durante un periodo de tiempo determinado es suficiente para obtener los beneficios para su salud. Cuando en realidad los beneficios se adquieren cuando incluimos al menos 5 raciones al día de frutas y verduras la mayoría de los días del año y, solo de manera excepcional, incluimos alimentos menos saludables”, nos explica.
Lo importante es cambiar los hábitos
Lo cierto es, eso sí, que no son pocas las personas deciden hacer unos días de détox tras el verano, ¿qué les recomendaría? “Mi recomendación sería que, en lugar de proponerse hacer una dieta de este tipo, se propusieran incluir hábitos saludables de manera progresiva para que, en el futuro, no fuera necesario llevar a la práctica este tipo de tendencias. Ya que este tipo de prácticas tienen fecha de caducidad y después suelen retomarse los malos hábitos de nuevo, por lo que los beneficios obtenidos, se pierden. Lo primero a tener en cuenta cuando se vaya a hacer algún cambio en la alimentación sería consultar con un nutricionista para que evalúe el objetivo y con una historia dietética completa previa, proponga unos cambios dietéticos asumibles y perdurables a largo plazo para conseguir y mantener ese objetivo”, nos cuenta.
Un plan depurativo para combatir los excesos veraniegos
Le preguntamos, por último, a la nutricionista de Sanitas cuáles serían las claves, en su opinión, de un buen plan depurativo, saludable desde el punto de vista nutricional y eficaz para conseguir nuestro objetivo frente a los excesos veraniegos en la alimentación. “Tras las vacaciones, es habitual que se trate de hacer una alimentación restrictiva para 'compensar' los excesos cometidos. No es recomendable este tipo de restricciones, ya que pueden provocar un aumento del estrés y del deseo de la comida al prohibirse ciertos alimentos”, nos explica.
Las claves para combatir los excesos veraniegos son:
- Mantener una alimentación equilibrada y variada con varias tomas a lo largo del día de alimentos saludables.
- Planificar los menús diarios para disponer de alimentos saludables en todo momento.
- Ir a hacer la compra sin hambre y con una lista que incluya todos los alimentos que se necesitan.
- Racionar la comida empleando la herramienta del plato saludable: añadir a la mitad del plato verduras, y a la otra mitad un cuarto para carne, pescado, huevo o legumbres y el segundo cuarto para cereales integrales (pasta, arroz, quinoa…) o tubérculos.
- Beber agua de manera habitual, evitando el consumo de alcohol y refrescos, aunque sean zero o light.
- Realizar cenas ligeras con una ración de verduras (como calabacín, champiñón, espárragos blancos o verdes) y una ración de alimentos ricos en proteínas (como huevo duro, filete de pollo plancha o sepia a la plancha). Añadir de postre una fruta y agua de bebida.
- Realizar ejercicio físico con frecuencia.
- Dormir bien, ya que un buen descanso está asociado con menores niveles de estrés y con una vida más saludable, así como con mejor resultados cuando se quiere bajar de peso.
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